Mochilero por paraísos artificiales, coeficiente intelectual fuera de rango, voz de espaldas al público, miembro del club de los 27-D.E.P. junto a Joplin, Hendrix, Brian Jones o Cobain, el alma de The Doors (sobre su cuerpo aún planean incógnitas) fue el más "literario" de los grandes rockeros. Lector enfermizo de Nietzche, fueron Rimbaud y Baudelaire, con toda esa peña, quienes marcaron su pasión por la poesía, anterior incluso a la musical.
Dos zarpazos del rey lagarto:
Hay cosas conocidas y desconocidas, y en medio están las puertas (the doors...of course)
Le toqué la pierna, y la muerte sonrió.
En An American Prayer, sus letras más personales y proféticas:
http://www.youtube.com/watch?v=IhaeaB91nvw
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