sábado, 19 de enero de 2013

Por las veredas


 
Dijeron por la radio, o eso creo,
que brotan senderuelas en los sueños
alineados de todas las cunetas, 

eso dijeron por la radio,
                                       y yo,
que nunca escucho los informativos,
cogí aquella cesta donde están tus ojos,
traslúcidas esporas de un pasado
huido, busqué incluso
la navaja dulce de tus labios
donde entallar con mimo las quimeras, 

y salí, me fugué por las veredas,
furtivo entre los surcos de esa vida
empeñada en brotar a quemarropa.
 

 

13 comentarios:

  1. Es un mundo misterioso el de los sueños y precioso a la vez.

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  2. Soñar dormido o despierto. A mi me gustan los sueños de duermevela, que los "guionizo" yo. El tuyo tiene buena pinta.
    Abrazos saltarines

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  3. me conmueve la melancolía en esa cesta...

    Un cariño,

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  4. siempre podemos volver a construir realidades partiendo de las piezas que guardamos en el cajón de los recuerdos...

    Una delicia de relato.

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  5. Lo leo, hoy, después del fb. No sé por qué, pero aquí se lee de otra manera, más lenta y saborenado cada verso. Te lo dije y lo repito, es un maravilloso poema que encierra bajo tierra mucho más de lo que dices.
    Besos, Amando.

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  6. Puestos a escoger, mejor una vereda que un andén.Magnífico poema, amigo poeta, magnífico, tan sin lo innecesario. Me gusta también la cesta, las esporas, la navaja (aunque sean labios, o tal vez por eso). Una vereda para no despertar o, si se despierta, sentirse levitar en los primeros segundos de la realidad, ésos que, a fuerza de repetidos, nos parecen conocidos y no lo son. No, para nada; no son conocidos, tienen siempre matices que, una vez que intentamos recobrar el sueño, se diluyen como humo.
    Un abrazo, poeta.

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  7. La cesta permitirá que se esparza la semilla de sus ojos y sus labios y la vereda te mirará y te hablará al oído el año que viene.
    Un beso

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  8. ¿Cuánta razón tienes Isolda, en el blog se inspira de otra manera al leerlo, para luego expirar lentamente su significado más profundo. Las senderuelas crecen libremente y forman un bello paisaje, tan delicado que a veces no podemos dejar huellas, adentrarnos en esa cuneta, sería estropear ese reguero tan especial, por eso casi siempre es mejor seguir caminando por veredas ya hechas, al menos tenemos la certeza de llegar a algún lado... Aunque arriesgarse puede ser un paso para llenar esa cesta de sueños cumplidos...
    Otra vez esta loca inspiración no me deja escribir un punto y final :)

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  9. Las veredas son màgicas, al pisar sus baldosas vamos escribiendo nuestros pasos por la vida.
    Gracias por tu visita Amando.
    Cariños.

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  10. Los sueños nos dan vida, porque cuando despertamos queremos ponerlos en marcha y darle cuerda al reloj.

    Besicos.

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  11. ¡Qué gozada de lectura! deja un poso tristón. Pero apetece en esta noche e lluvia y viento.

    Abrazos :)

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  12. Usas tan bien las palabras que este texto me sabe a algo muy jugoso.

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