Tenía por
costumbre leer el periódico atrasado que los camareros tiraban, al cerrar, en
la puerta del restaurante. No importaba demasiado que las noticias fueran del
día anterior. Al fin y al cabo, las novedades no eran sino clones impresos de
las novedades de ayer, fotocopias en una vida ya contada en otro diario anterior … Lo
leía sin convicción, con la desidia nocturna de quien nada espera.
Hasta que una noche, en la página
de esquelas, se enteró de su propia muerte. Por la de sucesos, supo que una
cornisa desprendida lo había aplastado la noche anterior, mientras recogía el
diario atrasado a la puerta de un restaurante. Por una vez, el periódico le
pareció interesante. Tanto, que no vio como, sobre su cabeza, se desprendía la
cornisa.
El tiempo y sus juegos... ¿Qué sentirá uno sabiendo cuándo, cómo, dónde?
ResponderEliminarMagnífico.
Si no leyera la prensa atrasada igual le daría tiempo a salvarse.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muy bueno, no digo insuperable, porque seguro que me sorprendes. Saltos y brincos
ResponderEliminarRealismo mágico, visionario que sabe sin saber si está o no. Un periódico de ahora, una crítica mordaz a la prensa que nos envuelve con sus noticias repetidas y que muchas veces nos esclaviza sin aportarnos nada.
ResponderEliminarEs un relato excelente, bien escrito, bien narrado... buena literatura, en definitiva.
Enhorabuena.
Muy bueno, eso pasa por leer periodicos atrasados. Un abrazo
ResponderEliminarMuy bueno, estupendo relato. Un abrazo
ResponderEliminarLa noticia que distrae para que pueda darse la noticia... Muy lograda esa petición de principio, esa perpleja intersección de planos entre el ideal y el real se da en los oráculos de los mitos de Edipo o de Paris, por no mencionar el Quijote o el Ramayana. Sorprendente relato en su sabia economía. Enhorabuena.
ResponderEliminarEste mundanal mundo bloguero, no deja nunca de sorprenderme. Y mira, amigo, que llevo meses en ello metido. Siete u ocho, no más... Pero es suficiente para ver de qué pie cojea. Suficiente para otear mil blogs y aterrizar sólo en uno.
ResponderEliminarNo hubiera (probabilidades matemáticas) aterrizado en el tuyo si no hubieras dejado constancia de tu presencia en el mío.
Ya ves. Pura matemática... Si es que las matemáticas tienen en cuenta el azar o las casualidades.
Un placer.
De veras: un placer.
Me he dado un garbeo entre tus líneas y observo que eres un grande esgrimista de puntos y comas, cosa que admiro porque no suelo hallar.
A más de ello, eres directo y conciso... cosa que de la admiración pasa a rayar en la más sana envidia.
Un placer. No puedo decir más.
Mi agradecimiento y mi más afectuoso saludo.
Me gusta especialmente como cierras el relato... como si para el protagonista el final no le pareciera propio.
ResponderEliminarUn abrazo.
(permite que te presente un blog de una amiga de letras que, por su sencillez de presentación y su contenido, creo no te va a dejar indiferente http://vivoaflordepiel.blogspot.com.es/ )
Un relato corto muy bien escrito. Me gusta.
ResponderEliminarFeliz fin de semana
Haber convertido las opiniones en ideas y las ideas en nada es la mayor contribución del periodismo actual a los mortales, sean de esquela o de mensaje. Se ignora la verdadera noticia. Ahora sólo interesan las posesivas, insidiosas, malhumoradas, frígidas concubinas de la verdad...
ResponderEliminarAdmirables las dos últimas entradas.
Un abrazo fuerte.
Pues leí la prensa de mañana y habían cambiado la página de cronológicas. Estar vivo tras ser publicado como difunto ha sido lo mejor de su vida.
ResponderEliminarBuen texto.
Un abrazo
Una maravillosa burbuja en el espacio tiempo
ResponderEliminarDos abrazos :)